El Día de Sant Jordi es una de las efemérides más destacadas en el calendario de Cataluña. El 23 de abril, fecha tradicionalmente asociada con el Día del Libro, en nuestra región y, en concreto, en Barcelona es mucho más. Se trata de un día muy especial en la ciudad condal que cada año se celebra con mimo para disfrute de los barceloneses y visitantes. Si su próximo viaje a Barcelona coincide con esta festividad, ¡asegúrese de vivirla como dicta la tradición! Desde Hotel Grums le animamos a alojarse en nuestro hotel boutique de lujo situado convenientemente en el centro de la ciudad para que aproveche al máximo esta jornada festiva.

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¿Qué se celebra exactamente el día de Sant Jordi en Barcelona?

El Día de Sant Jordi o, como se conoce en Cataluña, la Diada de Sant Jordi conmemora la muerte del santo homónimo en el año 303. Se celebra cada año el 23 de abril. San Jorge de Capadocia no solo es el patrón de Cataluña, sino también de Aragón y de otros países del mundo como Inglaterra o Portugal.

Además, es una jornada íntimamente ligada a la literatura. Desde la década de los 30, el 23 de abril es también el Día del Libro, dado que coincide con la muerte de dos maestros literatos: William Shakespeare y Miguel de Cervantes. Ambos fallecieron, no en vano, el 23 de abril de 1616.

Por este motivo, es tradición regalar libros el día de Sant Jordi. Libros, sí, pero también rosas. ¿Por qué se regala esta flor también? Esta costumbre se remonta a la Edad Media, ya que Sant Jordi es también el Día de los Enamorados. Así, era habitual que los hombres regalasen una rosa a sus enamoradas. Entonces, el 23 de abril es la fiesta de los libros y las rosas. ¡No se la pierda!

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En Sant Jordi, la fiesta está en las calles

El 23 de abril es un día donde nadie se queda en casa porque ¡la fiesta está en las calles! El colorido y los puestos callejeros de libros y rosas se apoderan de Barcelona. Es suficiente con dar un paseo por el centro de la ciudad para caer en la tentación. Las Ramblas es el epicentro de esta jornada en la que podrá sumarse a la tradición y hacer un regalo a esa persona especial.

Otros espacios como la Plaza de Catalunya o la Plaza Sant Jaume son excelentes para disfrutar de un ambiente que solo se da una vez al año.